Quizás no lo has
concebido, parece difícil la reflexión. Un día se levantó
la tristeza y dijo:
- Mi tristeza es
demasiado profunda, tanto que ya no puedo soportar, voy a la tierra de los
hombres a liberarme un poco de este peso.
Entonces toco la
puerta de algunos, mas no podía entrar porque se escuchaba alegrías y risas. Finalmente, la tristeza encontró una puerta
abierta, se adentró, encontró una persona
recostada en una silla. La tristeza pensó “este es mi oportunidad”, y quiso
rápidamente adentrarse en el corazón de esta persona pero cuál fue su sorpresa, que ya había
llevado una carga que podíamos aún decir doloroso hasta agónico. Sintió al
entrar en el corazón de esa persona algo más tremendo, algo más insoportable,
algo sofocante, tan sofocante que por unos instantes la tristeza misma se desvaneció para luego darse cuenta
de que ahora es más triste aún.
Entonces, como pudo salió huyendo de aquel lugar inevitablemente dando gritos desesperados como si se hubiera partido en dos. La tristeza huyó, regresó a las catacumbas de su mundo para solamente comprobar que era ahora es más triste que antes y quiso mirar, quiso saber, ¿Qué era esto que lo ahondaba y superaba? Hasta que vio y aun la misma tristeza amargamente lloro.
Entonces, como pudo salió huyendo de aquel lugar inevitablemente dando gritos desesperados como si se hubiera partido en dos. La tristeza huyó, regresó a las catacumbas de su mundo para solamente comprobar que era ahora es más triste que antes y quiso mirar, quiso saber, ¿Qué era esto que lo ahondaba y superaba? Hasta que vio y aun la misma tristeza amargamente lloro.
¿Qué fue lo que vio
la tristeza? Diríamos casi absurdamente ¿Qué es lo que hace la tristeza más
triste aún?
Nota:
Si tienes la respuesta escribanos para ver si acertaste:
e-mail: mystichealingart@yahoo.com
Si tienes la respuesta escribanos para ver si acertaste:
e-mail: mystichealingart@yahoo.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario